viernes, 20 de noviembre de 2009

EL ALUMNO CRÍTICO DENTRO DE LA SOCIEDAD POSMODERNA


La función de la escuela ha experimentado grandes cambios a lo largo de las últimas décadas. Esto ha sido debido al cambio de una cultura moderna a una cultura posmoderna. La cultura moderna se caracteriza por utilizar la razón como el único instrumento privilegiado que tiene el hombre para alcanzar conocimiento. Basada en un conocimiento científico en el que todo es cuantificable, observable y neutro, una cultura en la que solo se acepta una única idea de Verdad, del Bien y de la Belleza. Se trata de una cultura etnocentrista que desconsidera la diversidad. La escuela dentro de este modelo cultural, ignora las diferencias del desarrollo individual y cultural e impone contenidos perennes e intemporales de la humanidad (occidental) olvidando los procesos dejando de lado las emociones y sentimientos.


En las últimas décadas del siglo XX junto a las nuevas condiciones políticas, económicas y sociales que dominan el mundo occidental caracterizado por el imperio de la economía de libre mercado y de la globalización de los medios de comunicación, se ha impuesto una nueva manera de entender el mundo, la cultura posmoderna.


Este nuevo modelo cultural se caracteriza por un relativismo cultural, pluralismo intercultural en el que toda cultura, como construcción humana, es digna de respeto y supceptible de crítica y trasformación. Se ensalza un relativismo absoluto en culquier ámbito de la realidad, un pensamiento individualista que provoca una gran escisión entre el ámbito público y el ámbito privado y que renuncia a todo proyecto colectivo por y para la comunidad; se da importancia a lo efímero, lo cambiante, al culto al cuerpo y la apariencia juvenil. Es más importante el tener que ser, la apariencia; de esta manera se crea la idea de que la realidad no son más que los acontecimientos que nos muestran los medios de comunicación. Los elementos culturales se convierten en objetos de consumo que prentenden satisfacer los deseos del individuo en el momento bajo la idea de la libertad individual. Esta lógica del consumo destruye la cultura y no pretende convertir a los hombres en sujetos autónomos sino en buenos consumidores.

La escuela debe adaptarse a las exigencias educativas que la cultura posmoderna reclama. No se debe dar tanta importancia a la asimilación de la cultura hegemónica, sus conocimientos, sistema de valores, de manera académica porque sí, sino que el énfasis debe estar en el desarrollo de la subjetivación del individuo como sujeto de experiencias, pensamientos, sentimientos y emociones. Este enriquecimiento debe hacerse desde una perspectiva crítica y democrática que favorezca los intercambios culturales más diversificados. de esta manera se plantea la emergencia de un sujeto libre que pueda servir al desarrollo de la comunidad. Se trata de llevar a cabo una actividad educativa que desarrolle la razón del alumno, para que éste se convierta en sujeto crítico de sus acciones, que sea capaz de interpretar, reproducir y recrear la cultura.

1 comentario:

  1. Pero más allá de etiquetas como "modernidad" (razón) o "postmodernidad" (razón débil o no razón) y su fácil enfrentamiento, debemos ahondar en los autores y en la cultura de manera que en realidad lo representado por dichas etiquetas implica aspectos y matices que trascienden todo maniqueísmo. Un saludo, Marcos.

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